22 de Septiembre 2015
El gobierno más desastroso en la historia de Nuevo León está por terminar
Con la presentación del Sexto Informe de Gobierno de Rodrigo Medina ante el congreso del estado, es necesario recordar por qué los ciudadanos de Nuevo León decidieron ponerle fin al bipartidismo y elegir un gobierno ciudadano:
- Rodrigo Medina nos debe explicaciones sobre la deuda del estado. Según datos de la Secretaría de Hacienda, Nuevo León es el estado más endeudado del país en términos absolutos y como porcentaje de sus ingresos totales. La deuda de más de 133 mil millones de pesos que tendremos que pagar los nuevoleoneses y nuestros hijos, no se ha visto reflejada en tener un estado seguro y digno para vivir e invertir.
- Nuevo León, nido de corrupción. Durante los últimos seis años hemos sido testigos de graves casos de corrupción:
- La “ordeña” de Metrorrey: no sabemos a cuantos millones de pesos asciende el desvío por la instalación de taquillas irregulares.
- El desvío del fondo de pensiones de Isssteleón, que causó un daño patrimonial por casi 300 millones de pesos a la institución.
- El supuesto robo de 312 mil juegos de placas del Instituto de Control Vehícular de Nuevo León, que costó al erario millones de pesos y por el que nadie fue responsable.
- Los terrenos del gobernador y su familia en Mina, adquiridos de manera irregular y con presiones y amenazas a ejidatarios.
- La “casa blanca” del gobernador en Santiago, con un valor de 13 millones de pesos y adquirida apenas en octubre de 2014.
- Monterrey VI: proyecto multimillonario e innecesario empujado por el gobernador y por grupo Higa. Los ciudadanos hemos exigido su cancelación.
En muchos de estos casos las autoridades fueron cómplices. En ninguno hubo responsables ni castigos ejemplares a los corruptos.
- Nuevo León no es como lo pintan. El despilfarro del dinero público en publicidad fue el más grande en la historia de nuestro estado. El gasto del gobierno en este rubro ha aumentado año con año, hasta llegar a los 3.5 millones de pesos diarios. Sin embargo, la confianza en el gobierno estatal se encuentra por debajo del 40%. El informe y el despliegue de publicidad que lo acompañe no podrán esconder la realidad de este gobierno: ha sido un nido de corrupción, impunidad, irresponsabilidad y de malas decisiones para Nuevo León.
Al igual que México, Nuevo León no se mueve en la dirección correcta. Para recuperar la grandeza de Nuevo León, se necesita responsabilidad y compromiso con los ciudadanos. El reto de los diputados ciudadanos, y del primer gobierno ciudadano de Nuevo León, será trabajar a la altura de los problemas que han dejado los malos gobiernos del bipartidismo en nuestro estado.
