El viernes 26 de septiembre, 43 jóvenes desaparecieron a manos del crimen organizado luego de que la policía municipal de Iguala los entregara por instrucciones del edil José Luis Abarca. El grado de violencia utilizado en esta desaparición es de proporciones nunca antes vistas: "mexicanos matando a otros mexicanos. Como sociedad no podemos permitir que siga este tipo de crisis".
Así piensa el coordinador de los diputados locales de Movimiento Ciudadano en el Congreso del Estado de Puebla, Ignacio Alvízar Linares, quien afirma que esta crisis de violencia por la que está atravesando México no debe ser solo un asunto de preocupación político-partidista, sino que debe llamar la atención a un verdadero despertar ciudadano. "En distintas entrevistas me preguntan que qué opino respecto a si este caso perjudicará a los partidos en las próximas elecciones. Yo siempre respondo que más que a los partidos, está afectando íntimamente las fibras más profundas de nuestra sociedad".
Ignacio Alvízar considera que es una crisis de valores la que ha provocado el crecimiento indiscriminado de la violencia en México, llegando a extremos de tal nivel como los que han sucedido en Guerrero. “Nunca habíamos visto nada así”. Dijo que en este contexto todos los actores de la sociedad deben contribuir para contrarrestar este mensaje o discurso de violencia y en lugar de ello promover el diálogo y la paz. “No podemos seguir enviando este mensaje de choque.
No todo se resuelve con la violencia. Hay que dar el debate, pero en el marco del diálogo y los acuerdos”. Este mensaje viene a colación respecto a su participación en el Congreso del Estado. Alvízar Linares defiende como uno de sus principales postulados la concertación para lograr acuerdos de carácter legislativo.
En el contexto del caso Ayotzinapa, la defensa de un mensaje de paz debe provenir, dice, tanto de ciudadanos de a pie como de autoridades y legisladores. Ignacio Alvízar también defiende el hecho de que la participación de la sociedad organizada, de los ciudadanos que han logrado su crecimiento profesional o personal, mejoraría de manera inmediata la situación política del país, donde los gobernados ya rechazan a todos los personajes políticos.
“No es posible que no se haya sido ciudadanizado la política hasta ahora en México. Por eso hay desconfianza en las autoridades y esta desconfianza genera rebeldía. ¡Y cómo no!, si hay malos manejos e impunidad”, dice este diputado que llegó al Congreso del estado por parte del Movimiento Ciudadano, un partido que destaca entre sus principales líneas discursivas "acabar con los políticos de siempre”.
Alvízar se considera a sí mismo como uno de los legisladores que provienen de la sociedad. Con muchos años de servicio público en materia educativa y emprendedor por naturaleza, Alvízar Linares asegura que el ejercicio público debe ser de los ciudadanos, los empresarios, estudiantes, profesionistas, docentes, investigadores y todos los integrantes de esta sociedad que cada día, desde su trinchera, hacen que México avance.
En el marco de las declaraciones del Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, quien expresó "ya me cansé" cuando cerró la conferencia de medios en la que informó los avances de la investigación sobre la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapan desaparecidos, el diputado consideró que el grito de la sociedad mexicana "ya me cansé" también es un reclamo hacia la cúpula política y gobernante. “La sociedad ya se cansó de que el sistema político siempre siga impulsando a los mismos personajes que son corruptos y que colaboran con este mismo sistema. Para detener esta espiral viciosa de un sistema que engendra a los políticos de siempre, la clave es darle mayor poder a la ciudadanía”.
Esto no se resuelve, considera Ignacio Alvízar, con un caudillo un liderazgo único, como ocurre en otros institutos políticos. Desde su perspectiva, la solución debe provenir de toda la sociedad. "La respuesta somos todos”. El hartazgo social ante la situación que prevalece en el país se verá reflejado en las elecciones del próximo año, afirma.
El diputado calcula que el abstencionismo en los próximos comicios superará a 60 % de los electores. “Con una elección con tan pocos votos, los legisladores y funcionarios que lleguen estarán deslegitimados. Esa ausencia de autoridad provocará rebeldía, reclamos e insatisfacción”, adelanta.
