29 de junio de 2017
Los derechos de todas las personas, sin distinción, deben ser garantizados en la ley. Es algo que tiene que ver con la dignidad humana y el derecho al libre desarrollo de las personas. Por eso hablar de matrimonio igualitario es hablar de derechos humanos. Pero no es sólo eso, tiene que ver con lo que nos hace humanos: el deseo de compartir la vida en común.
El Matrimonio Igualitario ha sido un tema de debate amplio en Jalisco. Son ya varias las legislaturas en las que el tema se ha puesto sobre la mesa, pero sin llegar a los acuerdos necesarios. Incluso la Suprema Corte ha dejado claro en varias ocasiones que: el matrimonio entre personas del mismo sexo es un derecho que debe reconocerse en todo el país y que limitarlo a hombre y mujer es inconstitucional. Los congresos locales tenemos la responsabilidad de atender dicha disposición.
Por eso en un acto de congruencia, el pasado 23 de junio nos posicionamos públicamente a favor de la igualdad plena entre todas y todos. Creemos que el momento actual exige descongelar el tema y saldar una deuda pendiente que tenemos como sociedad.
El día de hoy presentamos una iniciativa para reconocer el matrimonio igualitario en Jalisco, en los artículos que se modifican NO se tocan temas como adopción, sólo los referentes a la figura del matrimonio y su definición. Lo que buscamos es lograr garantizar los derechos de todas las personas. Lo hacemos para dar cumplimiento a la resolución de la Suprema Corte. Lo hacemos para equiparar la ley con la realidad de nuestro estado.
Estamos seguros que es un buen momento para lograr coincidencias dentro de las diversidades. Hoy hay iniciativas de varias fracciones parlamentarias en este tema. Algunas de ellas tienen años en proceso de dictaminación. Estamos convencidos que para destrabar esta agenda pendiente podemos unir fuerzas, sumar ideas, encontrar coincidencias y lograr que en Jalisco todos seamos realmente iguales ante la ley.
Entendemos que en este tema podemos tener visiones distintas. Es claro que no todos pensamos igual, pero esta discusión amerita tener apertura y manejarse con respeto, no confrontación.
Al interior de Movimiento Ciudadano siempre ha existido la libertad de pensar diferente, de disentir. Es un proyecto donde las diferentes posturas son respetadas. Por eso, sin duda el reto será ser responsables, escucharnos y respetar las diferencias que puedan surgir, incluso al interior de los grupos parlamentarios.
Los que aquí firmamos, respaldamos la iniciativa presentada e invitamos a las y los diputados a ejercer un voto de conciencia basado en el respeto.
Al interior de los Diputados Ciudadanos, como en la sociedad misma, habemos personas que pensamos diferente. Vamos a respetar esas diferencias porque creemos que es muy significativo para este debate, porque eso es justo lo que debe suceder en la discusión pública. El reto más grande es encontrar en esas diferencias una respuesta que nos haga más fuertes como sociedad.
Es muy simple, todas las personas tenemos derecho a ser tratadas por igual sin importar a quien amamos y el Estado tiene la responsabilidad de garantizar los derechos civiles de todas las personas sin discriminación.
Debemos partir y reconocer que la realidad cambia y nosotros con ella y ella con nosotros. Por eso la realidad siempre termina superando a las leyes. Legislamos tarde y muchas veces radica en esas resistencias al cambio. Hoy tenemos frente a nosotros la oportunidad de saldar una deuda pendiente. Al final se trata de que todas nuestras diferencias tengan espacio, sean reconocidas y que todos los derechos sean para todas las personas.
Los Diputados Ciudadanos que aquí firmamos, respaldamos la iniciativa de Ley de Matrimonio Igualitario en Jalisco:
Diputado Ismael del Toro Castro
Diputada Fela Pelayo López
Diputado Alejandro Hermosillo González
Diputada Consuelo Robles Sierra
Diputada Adriana Medina Ortiz
Diputado Ramón Demetrio Guerrero Martínez
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