El proceso electoral 2015 en México rompió paradigmas y nos dejó varias lecciones. Los ciudadanos manifestaron en las urnas su hartazgo hacia una clase política cínica, superficial y que demostró que no sabía gobernar. Las nuevas tecnologías han generado ciudadanos más informados y que demandan buenos gobiernos, cada vez más cercanos y que les otorguen el poder de influir en las decisiones que impactan a su comunidad.
Desde hace poco más de 5 años Tlajomulco es el ejemplo de un gobierno que decidió empoderar a sus ciudadanos e invertir de manera eficiente su dinero. La abrumadora victoria que obtuvo Movimiento Ciudadano en este proceso electoral se debió, en gran medida, a que los ciudadanos percibieron cómo con voluntad y un equipo de trabajo comprometido se puede transformar la vida de los habitantes de un Municipio.
Una vez transcurrida la elección, resulta necesario ponernos a reflexionar, para identificar nuestros aciertos, pero sobre todos los errores que hemos cometido a lo largo de los últimos 5 años en Tlajomulco. Hoy Movimiento Ciudadano es la primera fuerza política de Jalisco, seremos mayoría en el Congreso del Estado y gobernaremos a más de 4 millones de jaliscienses; resulta imperativo tener claro los siguientes pasos para no defraudar a los ciudadanos que depositaron su confianza en nosotros.
Cuando Enrique Alfaro llegó a gobernar Tlajomulco en 2010, el Municipio se encontraba sumido en el abandono, la corrupción y la falta de transparencia eran el pan de cada día. Con voluntad de hacer las cosas y cuidando el dinero de la gente, Alfaro logró darle un giro de 180 grados a la vida del Municipio.
Poco a poco el Gobierno de Enrique Alfaro fue ganando adeptos en todo Jalisco, a través de programas y políticas públicas innovadoras, como el presupuesto participativo y el programa de uniformes y útiles escolares, de un ambicioso plan de obra pública y de impulsar apoyos a los sectores más vulnerables de la sociedad.
En 2012 llegó la oportunidad de llevar este proyecto a todos los rincones de Jalisco con Enrique Alfaro a la cabeza, sin embargo, no nos vimos favorecidos por los ciudadanos. A pesar de la derrota en la elección para Gobernador, en Tlajomulco pudimos refrendar un segundo periodo, lo que nos dio la oportunidad de continuar con este legado de buenos gobiernos.
La Administración que tuve la oportunidad de encabezar tenía el reto de seguir siendo ejemplar, pero el desafío no era sencillo, Tlajomulco era el único gobierno metropolitano que no pertenecía al PRI, lo que nos orilló a navegar contra la corriente, sin el apoyo del Gobierno estatal. Sin embargo, logramos estar a la altura de los habitantes de Tlajomulco, nos concentramos en gobernar de manera eficaz y poniendo al centro a los ciudadanos.
No solo dimos continuidad a los programas del Gobierno de Enrique Alfaro, continuamos con muchos proyectos de infraestructura, impulsamos proyectos como la creación de la primera escuela municipal gratuita de ballet, ampliamos la Red Municipal de Unidades Deportivas, la Red de Centros Multidisciplinarios, la Red de Centros Alternos para jóvenes, el programa Ciudad Segura, el programa ABC para impulsar la alfabetización, creamos la OPD de agua potable y nos convertimos en el Municipio con más inversión privada de todo Jalisco y el más transparente de todo México.
Estas acciones de buen gobierno nos llevaron a que en estas elecciones Alfaro y los candidatos de Movimiento Ciudadano pudieran seguir con un referente de buen gobierno, un ejemplo de que sí se puede dar resultados que se traducen en una mejor calidad de vida. Las acciones realizadas en Tlajomulco son evidentes para los jaliscienses y esto se reflejó en el sentido de su voto.
Una de las grandes lecciones de este proceso electoral es que las elecciones no se ganan con guerra sucia, con medios de comunicación hablando mal de un contrincante ni con la compra de votos. La gente cada vez está más informada a través de las redes sociales y votan por buenos gobiernos que rindan cuentas a los ciudadanos.
Si Movimiento Ciudadano en Jalisco desea seguir siendo un referente a nivel nacional debe demostrar que habrá buenos gobiernos no solo en Tlajomulco sino en todo lo que se ganó en esta elección. Hoy queda claro que si defraudamos al electorado las consecuencias se reflejarán en la elección del 2018.
Presidente Municipal de Tlajomulco.