18 de octubre de 2018
Para luchar contra el cáncer de mama tenemos que conocer las herramientas con las que contamos de nuestro lado para detectarlo y saber reconocer los síntomas que nos pueden dar las primeras alertas para identificarlo.
El primer paso siempre será la autoexploración y la visitas al médico al momento de percibir algo extraño en los senos.
¿Cómo realizar una autoexploración?
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Para comenzar, debes pararte frente a un espejo y observar la forma de los pechos, buscar bultos visibles o enrojecimientos, además de asegurarse que ambos senos se encuentren al mismo nivel.
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Repite el procedimiento con los brazos hacia arriba de tu cabeza.
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Palpa ambos senos de forma circular con 3 dedos de tu mano.
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Repite los mismo paso acostada de lado en tu cama.
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Como último paso toma tu pezón con dos dedos y presiónalo para verificar que no derrame líquidos.
La información es la mejor herramienta ante cualquier caso, por eso te compartimos algunos mitos que no deben difundirse ya que fomentan la desinformación y realidades:
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Mito:
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El cáncer se presenta de la misma forma en todos los pacientes.
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Realidad:
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Existen varios tipos diferentes de cáncer de mama y cada uno tiene implicaciones únicas.
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Mito:
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El cáncer de mama no es doloroso.
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Realidad:
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La sola presencia de una bolita sospechosa en el seno debe de alertar a la mujer para buscar ayuda profesional competente, no importa si presentas dolor o no.
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Mito:
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El cáncer de mama siempre se presenta como un tumor palpable.
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Realidad
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Los estudios de imagen, como la mastografía y el ultrasonido, tienen como objetivo detectar tempranamente la presencia de cáncer, o sea, cuando la enfermedad es tan temprana que no ha logrado formar una “bolita” (tumor).
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Mito:
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A mayor tamaño en los senos mayor es el riesgo de cáncer.
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Realidad
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El tamaño de la glándula no guarda ninguna relación con el riesgo de cáncer.
El primer paso siempre será luchar sin miedo y en Jalisco todos luchamos juntos para combatir esta terrible enfermedad.
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