15 de abril 2021
Históricamente, los atropellos en contra de los Derechos Humanos de las Personas con preferencias sexuales distintas a las heterosexuales, en concreto, de la población perteneciente al sector Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Intersexual, Qeer y Más, LGBTTIQ, han sido una constante, en la cual, la mayoría de las autoridades, así como propiamente la sociedad se han mantenido omisas.
Es por ello que el día de hoy apreciables representantes de los Medios de Comunicación y Periodistas que nos honran con su presencia, aprovecho para mostrar la importancia de retomar una iniciativa que actualmente se encuentra en el olvido y que es de suma importancia, me refiero a la intención de convertir en Ley Estatal la eliminación de los llamados esfuerzos para corregir la orientación sexual e identidad de género y que por sus siglas se conocen como ECOSIG, las cuales se conforman de diversas terapias para la conversión sexual.
Es lamentable que se menoscaben las atrocidades que se encuentran cometiendo quienes se dedican a lo que a todas luces son actos de fe, mediante las terapias de reconversión o reparación sexual ECOSIG, ya que entre algunos de los métodos se encuentran violaciones grupales o incluso violaciones masivas de personas, torturas, medicaciones innecesarias, daños psicológicos irreparables, entre muchos otros métodos brutales contra personas homosexuales, todo ellos sin un sustento o rigor científico.
Han sido diversos los Organismos Internacionales que se han manifestado en contra de dichas practicas, entre las que se encuentra La Asociación Americana de Psiquiatría, quienes en 1973 eliminaron de sus diagnósticos el que la homosexualidad representaba un trastorno mental; Asimismo la Organización Mundial de la Salud hizo lo propio en 1990, momento en el que descartó que la Homosexualidad representara una enfermedad psíquica, psicológica o mental.
Nuestra Carta Magna establece en su artículo 1ro el que todos los seres humanos nacemos libres en dignidad y derechos, dentro de los que destaca la Igualdad y la no discriminación, situación que nos considera absolutamente a todos los Seres Humanos, por la que es imperante el que nos emancipemos de todo tipo de actos discriminatorios por referencias sexuales, ya que no son otra cosa más que atentados en contra de la dignidad humana.
Cabe hacer la mención de que la CDMX es el único Estado en el que se ha conseguido Legislar respecto del tema, Ley mediante la cual se han conseguido castigos que van de uno a tres años a quienes incurran en dicho delito.
Asimismo, al conseguir esta legislación a nivel local, lograríamos el que de manera urgente se comiencen a contabilizar los delitos que se cometen al respecto y así, comenzar a trabajar en la capacitación de nuestras autoridades, en la búsqueda de la detección de la comisión de los mismos y que sean tratados mediante la perspectiva de diversidad sexual a quienes sean victimas de este delito.
Es urgente el detener la violencia homofóbica que se vive en nuestro estado, ya que a todas luces, son los prejuicios los que están permitiendo la comisión de delitos diversos en el sector LGBTTIQ, situación que no debemos seguir tolerando como Legisladores Locales.
Es por situaciones como la acontecida a Verónica Fonseca, quien mediante engaños se convirtió en victima de una de estas terapias de reconversión sexual, por la cual me mantendré en una constante lucha, para que de una vez por todas se eliminen y se castiguen este tipo de prácticas que atentan contra la salud y propiamente contra la vida de las víctimas.
Aquí en el Congreso de Jalisco hay desde hace varios meses un dictamen que conjunta dos propuestas legislativas para evitar estas violaciones a los derechos humanos. Sin embargo, no se ha votado en el Pleno.
Es por ello que realizo un respetuoso exhorto a todas mis Compañeras y Compañeros Legisladores para que mediante la unión de todos nuestros esfuerzos logremos el que la Junta de Coordinación Política del Congreso Local, suba dicha iniciativa para que se realice su segunda lectura, así como su aprobación y logremos que en Jalisco se prohíban y se penalicen dichas prácticas.
