Aguascalientes, Ags.
4 de Septiembre del 2014
A todos los medios de comunicación, les entrego este escrito de un lamentable hecho de un mal maestro
"....a mí se me hace que traes más hambre que ganas de estudiar", palabras del profesor Cirilo Álvarez García, Director de la escuela primaria J. Guadalupe Peralta Gámez.
Aguascalientes ha sido punta de lanza en temas prioritarios como el empleo, inversión y sobre todo la educación. Es en este rubro que en primer lugar he de reconocer la labor del ejecutivo estatal y por ende al titular del IEA, porque han demostrado con hechos que la educación de la niñez aguascalentense este por encima de todo.
En mi calidad de representante popular es mi obligación atender a la ciudadanía y escuchar sus demandas y necesidades; en el devenir diario de mis labores recibí a una madre de familia que acudió a mis oficinas bastante molesta, pero sobre todo decepcionada. Debo decirlo, me moleste de sobre manera cuando al preguntarle el motivo de su incomodidad me narró una serie de hechos que al escucharlos creí que estaba en presencia del guion de una película sombría de Luis Buñuel, sobre un México que aparentemente ya no existe.
La señora y su hijo acudieron ante un Director de escuela a solicitar su apoyo para que su hijo continúe sus estudios (mismo que está obligado en su carácter de servidor público a atender a la ciudadanía, pero sobre todo de luchar porque todos los niños de México tengan acceso a la educación laica, pública y gratuita), cuál fue mi sorpresa al escuchar que este director de escuela no sólo, no cumplió con su obligación de garantizar la educación de un menor, sino que además socavó, humilló, denigró y todos los demás sinónimos posibles para insultar y hacer menos a un niño que lo único que quiere es estudiar.
Me atreví a hacer una llamada telefónica al saber de esta situación, cuál fue mi sorpresa, escuchar a un maestro prepotente y patán además de soberbio y mal educado, además de amenazante en su actitud de atender o no la solicitud del posible ingreso del menor del que hago referencia.
Es increíble que en pleno siglo XXI existan funcionarios como éste, que gocen de hacer menos a sus semejantes sólo porque son titulares de un cargo público, es por este tipo de funcionarios que se hacen llamar "Maestros" que después un sector tan noble como el del Magisterio se ve afectado en su imagen por un sólo mal elemento que hace de las suyas.
No creo ni necesario, ni prudente transcribir los insultos que esta persona profirió en contra del niño y de su madre, porque convertiría este escrito en un pleito de verdulería, he pedido ya la intervención del director del IEA para tomar cartas en el asunto y pido a la base magisterial no seguir ese ejemplo, ya que siempre he reconocido la labor titánica que desempeñan los buenos maestros como el mencionado, que son los más y pido sigan esta labor titánica con su espíritu de servicio y que sigan siempre como lo he sostenido que son ejemplo de entrega de este país. Analizo muy seriamente que cartas habré de tomar en torno a este asunto.