Baja California en riesgo de zika por flujo migratorio

Autor: 
Saul D.Martinez

Tan solo en el 2015, en Mexicali hubo 210 casos de dengue mientras que Tijuana solo reportó 5 casos importados de esta enfermedad, de acuerdo a las cifras del Sector Salud en el Estado.

La presencia del Aedes Aegypty, mosquito transmisor de esta enfermedad, así como del Chinkungunya y el Zika, es anormal en Baja California, sobre todo en la zona fronteriza.

Incluso, este mosquito fue detectado por primera vez en el condado Imperial, en California, en enero del 2015, de acuerdo al reporte del Departamento de Salud Pública de este condado.

En el 2014, personal del Sector Salud en Baja California dieron asistencia a Sonora y Baja California Sur para contener el avance del mosquito y la enfermedad, ante el incremento de brotes y el paulatino acercamiento del Aedes Aegypti al estado.

David Ibarra Ojeda, responsable del Programa de Vectores en el estado dijo que solo así lograron retrasar la llegada del mosquito y las enfermedades, pero es una situación que no durará por mucho tiempo si la población no participa.

Poco a poco, los casos han ido apareciendo en la ruta que los migrantes siguen desde el sur al norte del país.

Esfuerzos nacionales

A principios de marzo, Baja California se unió a la Semana Nacional contra el Dengue, Chinkungunya y Zika, en un evento simbólico de arranque de actividades en Mexicali, en una colonia al sur de la ciudad.

Rigoberto Izarraráz Hernández, director de Servicios de Salud en Baja California, enfatizó la necesidad de capacitar a la población para autoprotección, medida que ayudó a contener los brotes de dengue el año pasado.

Para prevenir el Zika, dijo, la estrategia es la misma. Usar repelente, manga larga, mosquiteros en ventanas y principalmente evitar el acumulamiento de agua en los patios.

Este año, el Sector Salud cuenta con un presupuesto adicional de más de 9 millones de pesos para la compra de insecticidas, equipo, vehículos y personal para contener el mosquito.

Macetas, floreros, llantas y cubetas con agua fueron utilizadas para ejemplificar de manera clara lo que las personas deben de evitar en sus domicilios para evitar la reproducción del Aedes  Aegypti.

Cuestión de tiempo

En el 2015 se colocaron 2 mil 300 ovitrampas en todo el Estado y se prevé que este 2016 sean más de 5 mil 200 las que se coloquen para el monitoreo del mosquito, dijo Izarraráz Hernández.

A través de la vigilancia entomológica, el personal del Sector Salud procurará enfocarse para evitar los brotes, al revisar periódicamente las ovitrampas para confirmar la presencia del mosquito en zonas urbanas.

“Se habla del Zika a nivel nacional (…) no estamos exentos de la enfermedad, eventualmente la vamos a tener aquí y hay que estar preparados”, expresó, al recordar los 143 casos de esta enfermedad o los 1 mil 100 casos de Chinkungunya registrados a la fecha en México.

Virus migratorio

“Los vectores tienen relación con la movilidad de las personas, el comportamiento de los brotes en el país nos dice que siguen las rutas similares a las de los migrantes”, explicó el director de Servicios de Salud.

Con el registro de un caso de Zika en Sinaloa o los casos de Chinkungunya en Baja California Sur, es cuestión de tiempo para que alguno se presente en Baja California, comentó.

“La estrategia es preparar a la población para evitar la dispersión y que esté fuera de control”, dijo. “Así podemos evitar un daño a la salud pública y un daño económico al Estado”.

Algún portador de Zika o Chinkungunya que llegue a Baja California y sea picado por un mosquito Aedes Aegypti, podría desencadenar un brote.

¿Podemos decir que Baja California está protegida por ahora?, se le cuestiona a Ibarra Ojeda. “No por mucho tiempo”, respondió el responsable del Programa de Vectores.

Zonas de riesgo

Los drenes no son un hábitat natural para el mosquito, ya que éstos nacen sanos y se reproducen en aguas limpias, estancadas en macetas, cubetas o llantas.

Bajo esta premisa, dijo Rigoberto Izarraráz Hernández, se incrementa las probabilidades de zonas de riesgo en el Estado, que actualmente asciende a 43 localidades.

En Mexicali, colonias como Flores Magón, Pueblo Nuevo o Hidalgo, han arrojado positividad a la presencia del Aedes Aegypti, declaró David Ibarra Ojeda.

El año pasado, zonas como Terrazas del Valle y Matamoros, en Tijuana, así como Bahía de los Ángeles o Indeco Lomitas, en Ensenada, presentaron positividad a la presencia del mosquito.

Resistencia o ignorancia

El personal del Sector Salud encargado de fumigación ha sido apedreado, increpado, amenazado, corrido y demandado por ciudadanos, afirmó Ibarra Ojeda.

El responsable del Programa de Vectores dijo que las camionetas fumigadoras han sido apedreadas e interceptadas por ciudadanos molestos con la fumigación.

Incluso, en uno de los casos tuvieron que responder a una demanda interpuesta en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) por una persona que se quejó por estas acciones.

“Le quiero decir a la gente que cuando vean los vehículos, que no tengan miedo, no pasa nada al ser humano, al contrario, ayúdenos abriendo puertas y ventanas”, dijo Ibarra Ojeda. “Es un insecticida con mínima toxicidad para el ser humano, no pasa nada”.

En lo que va de este año, el caso de Zika más cercano a Baja California ocurrió en San Diego, durante febrero, así como el presentado en Sinaloa.

La enfermedad comenzó a llamar la atención en las autoridades estatales en julio del año pasado, cuando el entonces titular de la Secretaría de Salud, Sergio Tolento Hernández, mencionó el nombre de este virus al recapitular los casos de dengue y chinkungunya en Baja California.

Del otro lado

Desde que el Aedes Aegypti fue detectado en el condado Imperial, en enero del 2015, su presencia se fue incrementando en todo el condado con el paso de las semanas.

El mosquito es detectado de manera más común en los patios, donde coloca sus huevos en recipientes con pequeñas cantidades de agua.

De acuerdo al Departamento de Salud Pública del Condado Imperial, para su captura se utilizan dos tipos de técnicas. Una de ellas, con unas trampas llamadas BG-Sentinel, que ayudan al conteo de mosquitos en determinada zona, y otra, las ovitrampas para detectar los huevecillos.

Los esfuerzos para controlar la presencia del mosquito han ido desde pláticas con doctores, clínicas y hospitales para que puedan identificar posibles casos y los canalicen al Departamento de Salud Pública, mientras que otra es la vigilancia y el abatimiento del Aedes Aegypti en el condado.

Pero la tercera y más importante, es el trabajo que los oficiales del condado han mantenido con grupos comunitarios y organizaciones para compartir información acerca del virus Zika y la prevención del mosquito.

Hasta ahora, solo casos de virus del Oeste del Nilo han sido detectados en el condado Imperial, cuyo mosquito encargado de transmitirlo fue detectado por primera vez en este condado en agosto de 2003, sin embargo el transmisor del Zika ha sido encontrado ya en 12 condados de California y se presentó un caso por transmisión sexual.

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