Para Movimiento Ciudadano, los compromisos democráticos y republicanos van más allá de una convocatoria y la firma de un “acuerdo nacional” convocado desde Palacio Nacional, porque de poco sirven esas firmas si al mismo tiempo, desde lo más alto del poder, se amedrenta sistemáticamente a otras instituciones, a los propios gobiernos estatales, y a quienes discrepan con el Gobierno Federal.
Lo que establece este supuesto acuerdo no es nada extraordinario; de hecho, está dispuesto en la Constitución y en la legislación electoral mexicana, de manera que todos los actores políticos están obligados a cumplirlas.
En primer lugar, en Movimiento Ciudadano no necesitamos firmar un Acuerdo para reivindicar nuestra posición a favor de la democracia, ya que siempre hemos tenido la firme convicción de defenderla, fortalecerla y de oxigenar la participación ciudadana.
Pero más nos llama la atención el interés selectivo del Presidente por los asuntos públicos. Hoy convoca a este supuesto "acuerdo nacional", pero en Movimiento Ciudadano nos preguntamos por qué no ha convocado:
• A construir un acuerdo nacional para corregir la estrategia contra el COVID-19 y enderezar la política de vacunación.
• A construir un acuerdo nacional para atender la crisis económica que cerró más de un millón de empresas, llevó a 10 millones de personas a la pobreza laboral, y donde 5.2 millones de niñas, niños y jóvenes no han podido continuar sus estudios.
México necesita voluntad política, apertura y verdadera vocación democrática de su Poder Ejecutivo para convocar a acuerdos nacionales que realmente atiendan y resuelvan los grandes problemas del país, y no más actos de simulación que solo construyen distractores.
Clemente Castañeda Hoeflich
Coordinador Nacional de Movimiento Ciudadano