En el DF, al término de la marcha que partió del Ángel de la Independencia y llegó al Zócalo congregando a cerca de diez mil estudiantes de diferentes escuelas y organizaciones sociales, el actor Daniel Giménez Cacho y el cantante Rubén Albarrán leyeron el pliego petitorio del movimiento de apoyo y solidaridad con los familiares de los desaparecidos.
El apoyo a estudiantes y familiares que exigen la aparición con vida de los 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa tuvo eco en todo el país y más allá de las fronteras demandando a las autoridades federales, estatales y locales encontrar a los jóvenes desaparecidos el 26 de septiembre pasado.
En la Ciudad de México, al término de la marcha que partió del Ángel de la Independencia y llegó al Zócalo congregando a cerca de diez mil estudiantes de diferentes escuelas y organizaciones sociales, el actor Daniel Giménez Cacho y el cantante Rubén Albarrán leyeron el pliego petitorio del movimiento de apoyo y solidaridad con los familiares de los desaparecidos.
Las demandas son la presentación de los 43 desaparecidos, con el uso de protocolos eficientes de búsqueda apegados a los más altos estándares internacionales.
Demandaron acciones coordinadas e investigaciones rápidas y exhaustivas que involucren a todas las instancias competentes y manifestaron su enérgica protesta al gobierno federal por su tardía respuesta hasta ocho días después de los hechos.
También piden el esclarecimiento e identificación de los más de 20 cuerpos hallados en las fosas clandestinas en Iguala.
El tercer punto es el enjuiciamiento y castigo a los actores materiales e intelectuales, pues no aceptarán que los hechos se atribuyan al crimen organizado, “cuando a todas luces sabemos que se trató de un crimen de Estado en el que policías y funcionarios de distintos niveles de gobierno estuvieron involucrados por omisión o aquiescencia”.
Exigieron que las autoridades traten con todo respeto a los familiares de los estudiantes y los mantengan informados antes que a los medios de comunicación de cada avance en la búsqueda permanente de sus seres queridos, así como en el proceso de identificación de los cuerpos.
En Chilpancingo, unas doce mil personas, entre estudiantes, maestros, trabajadores, guardias comunitarios, sindicalistas y ciudadanos en general, pidieron castigar con “todo el peso de la ley” a los responsables de los hechos sangrientos.
Durante su recorrido hacia el entronque de la Autopista del Sol y la carretera libre Acapulco-Chilpancingo, los manifestantes mostraron su rechazo al Gobierno de Guerrero y exigieron el regreso de los normalistas desaparecidos desde hace doce días.
En Guanajuato, durante la inauguración del 42° Festival Internacional Cervantino, más de dos mil personas se manifestaron para condenar la desaparición de los normalistas.
De forma simultánea, en muchas localidades del país y diferentes ciudades del mundo también se llevaron a cabo manifestaciones de apoyo a la lucha en donde todos gritaban consignas contra el clima de violencia e inseguridad en México.