24 de febrero 2016
Hay ciertos personajes, movimientos, grupos o partidos políticos que incomodan al sistema político en nuestro país. Se trata de mantener el statu quo, aunque en muchas ocasiones haya un sistema de partidos que aparenta oposición, llámese PRI vs PAN o demócratas contra republicanos. Ambos lados están de acuerdo en mantener las cosas como están, porque reciben financiamiento público, porque hay un orden establecido y porque los empresarios así están cómodos.
En el caso de México ese orden establecido y permanente busca que prevalezca la corrupción porque así todo es mejor y la función pública resulta ser una actividad millonaria. Actores que se opongan a ese modus operandi y a ese statu quo son minimizados por el sistema político que en su conjunto aglutina, partidos políticos, instituciones viciadas y corruptas, gobiernos federales, locales y medios de comunicación.
Aquí presentamos algunos casos donde la amenaza al status quo fue anulada por el sistema político:
Andrés Manuel López Obrador en 2006
Un primer presidente no proveniente del PAN y del PRI era impensable. El apoyo de la comunidad universitaria, indígena y de los sectores más vulnerables lo fortalecía. Su discurso amenazó a toda la cúpula y al sistema político en nuestro país. No solo fue la estructura gubernamental la que atentó contra la voluntad popular, sino los medios de comunicación y empresarios también. Para muestra esta recopilación:
Enrique Alfaro compitió por la gubernatura del estado de Jalisco en 2012 y sin estructura partidista logró obtener un porcentaje cercano al ganador, Jorge Aristóteles, para 2015 obtuvo la presidencia municipal con el firme propósito de llegar a la candidatura para gobernador. Una filtración editada fue más que suficiente para que PRI y PAN, carentes de memoria, denunciaran la corrupción e ilegalidad del jefe de gabinete de Alfaro. En lo que parece un claro intento por restarle positivos a Enrique Alfaro Ramírez
Bronco en Nuevo León
Sin duda el Bronco fue un dolor de cabeza para los medios de comunicación y los partidos políticos. Ganó una campaña electoral sin gastar millones en Televisa o TvAzteca, además en su discurso siempre acusó a las televisoras de corromperse, de ser cómplices del gobierno de Medina y de manipular la información. Más allá de su ambigüedad y su dudosa independencia, “El Bronco” fue víctima de esa estrategia para anularlo utilizando a Televisa.
Movimiento Ciudadano
Un partido que ha demostrado crecimiento en Jalisco y que ha impactado a nivel nacional es Movimiento Ciudadano, antes Convergencia. Su coordinador nacional ha sido víctima de estas anulaciones con proceso penales que se le adjudicaron, y que hace unos días incluso culminaron en una compensación económica por daño moral. Este partido ha sido sancionado con 76 millones de pesos por el uso indebido del padrón electoral. Los mismos consejeros electorales señalaron que no había pruebas suficientes, pero la mayoría se impuso y se determinó la sanción. Aunque hay instancias jurisdiccionales que pueden revertir la decisión, este puede ser un caso de intento de anulación para actores o grupos que intentan cambiar el status quo.
Nuestra democracia necesita pluralidad, necesita libertad, necesita autonomía y cumplimiento de los derechos humanos. Si eso implica cambiar, se debe lograr cambiarlo, no anularlo. Nuestra democracia madura a golpes del sistema, a muertes, a opresiones y censura. Basta.