Autor:
Zedryk Raziel
27 de enero del 2017
Si bien fue un acierto que el Gobierno de Enrique Peña Nieto convocara a la unidad frente a las amenazas y desafíos que representa el Mandatario estadounidense Donald Trump para México, no cuenta con la confianza de la población para encabezar este esfuerzo, afirmó Movimiento Ciudadano (MC).
Mediante un posicionamiento, planteó que debe serCuauhtémoc Cárdenas quien dirija las acciones de protección de los intereses del País mediante un Frente para la Defensa de la Dignidad y Soberanía Nacional.
"El llamado a la unidad es de los pocos aciertos del Gobierno federal en materia de política exterior, lamentablemente no cuenta con la confianza de la ciudadanía para encabezar un proyecto de esta naturaleza.
"La persona idónea para convocar es el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien tiene la capacidad, la calidad moral, la confianza y el reconocimiento de todos los sectores de la población para impulsar esta iniciativa por encima de los partidos", afirmó.
El partido que encabeza Dante Delgado consideró que el Gobierno de Peña Nieto reaccionó tarde y mal a la amenaza que el Presidente Trump significa para la estabilidad de la región y los intereses de México.
"Desde el inicio del proceso electoral en el país vecino, quedó evidenciado que nuestro Gobierno no está preparado para enfrentar un escenario de esta magnitud, por lo que se vuelve indispensable la participación de académicos, intelectuales, científicos, artistas, comerciantes, empresarios, activistas, universitarios, obreros, campesinos y ciudadanos en general en la construcción de un Frente para la Defensa de la Dignidad y Soberanía Nacional", afirmó.
Movimiento Ciudadano señaló que dicho Frente debe unificar las posturas en cuanto a la construcción del muro fronterizo, la relación comercial con Estados Unidos y la defensa de los derechos humanos de los migrantes mexicanos y latinoamericanos.
Asentó que una primera acción concreta debe ser establecer una mesa de trabajo con representantes de los tres Poderes y de la sociedad civil para definir cuál será la política exterior de México en este nuevo escenario.
También, agregó, se deben crear mecanismos para garantizar la participación de expertos en la discusión diplomática y comercial de la relación bilateral.
Urgió a abrir el diálogo con el Congreso, gobernadores y autoridades locales de Estados Unidos que respeten los derechos humanos y estén dispuestos a mantener una relación cordial con México.
La comunicación, agregó, debe incluir a los sectores culturales, educativos y productivos en ambos países.
Por último, apremió a estrechar la colaboración con organizaciones de defensa de los migrantes en Estados Unidos para reforzar la defensa de sus derechos.
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