De aprobarse la Iniciativa del diputado Cuauhtémoc Pola Estrada, para que la Universidad Veracruzana (UV) pueda iniciar leyes o decretos en el ámbito de sus competencias, podría actualizar su Ley Orgánica, para dar soporte legal al modelo educativo en vigor, afirmó el académico y ex director de la Facultad de Derecho, Manlio Fabio Cazarín León.
Cuauhtémoc Pola afirmó que reformar el artículo 34 de la Constitución Política del Estado beneficiaría en mucho a toda la comunidad universitaria y por supuesto a Veracruz, ya que se daría oportunidad a que la UV se modernice y no siga rezagándose.
Los nuevos tiempos y la alta demanda de espacios en la Educación Superior obligan a la UV a modernizarse continuó, y para ello necesita modificar su Ley Orgánica, con apoyo de los legisladores.
El Legislador expuso que “se aprovecharía la riqueza académica, cultural y la experiencia de los investigadores de institutos como Ciencias Jurídicas, para desde ahí proponer reformas y actualizar la normatividad, de acuerdo con las condiciones y la realidad de la casa de estudios”.
Recordó que la UV es legal y constitucionalmente autónoma, pero en 1996 perdió el derecho de iniciar leyes: “Devolverle esa facultad permitiría que desde su interior se impulsen reformas relacionadas con los grandes temas de Veracruz”.
LOS UNIVERSITARIOS, DE ACUERDO…
El académico y ex director de la Facultad de Derecho, Manlio Fabio Cazarín León, se congratuló por la propuesta del Diputado local y confió en que habrá consenso entre los legisladores para aprobarla. Recordó que como aspirante a Rector de la casa de estudios, uno de sus proyectos era lograr una nueva Ley Orgánica, “lo cual implica dar a la Universidad la facultad de iniciativa de ley, y algo más”.
Dijo que se requiere modificar la Constitución del Estado, a efecto de que la UV pueda actuar o desplegar todo su potencial, buscando siempre la realización efectiva de sus funciones sustantivas, como la docencia, la investigación, la difusión y la extensión.
De acuerdo con Cazarín León, en el ejercicio legislativo siempre habrá riesgos, “pero en el caso de la Universidad lo deseable es presentar una propuesta moderna, coherente, acompañada de debate e intercambio, de reflexión y diálogo entre autoridades y diputados, para entender la filosofía, objetivos y alcances de lo que normativamente se propone”.
Consideró que uno de los principales pendientes es actualizar la legislación universitaria para dar soporte legal al modelo educativo en vigor: “nosotros tenemos una Ley Orgánica que data de los noventa, acorde con planes o modelos rígidos”.
Se necesitan reformas que acompañen la regulación de contenidos y temas que impactan a la universidad pública –continuó–, relacionados con la armonización de disposiciones federales y locales. Son temas sensibles, como derechos humanos, transparencia y acceso a la información, responsabilidad hacendaria y contabilidad gubernamental, entre muchos otros.