El 15 de diciembre del año pasado el Senado de la República aprobó con 74 votos a favor, 20 en contra y una abstención, la reforma política que dará paso a que el Distrito Federal se convierta en la Ciudad de México. Después de esta aprobación, era un mero tramite que la reforma fuera avalada por 16 congresos locales de los estados.
Con estos procesos finalizados, la Comisión Permanente del Congreso hizo la declaratoria de constitucionalidad de la reforma política del DF, con lo que ya sólo falta que sea publicado por el Ejecutivo en el Diario Oficial de la Federación.
Así es como la CDMX, que es el nombre de “marca”, que ha sido promovido desde hace ya unos años por el gobierno de la ciudad para promocionarse con el turismo internacional, se oficializa.
Hace un tiempo publicamos esta infografía que resume algunos de los cambios que traerá consigo la reforma:
Más allá del nombre, lo que preocupa en varios sectores de la ciudadanía es la conformación de la Asamblea Constituyente. La convocatoria para su integración tendrá que salir máximo 15 días después de que la reforma sea publicada en el DOF.
Esta asamblea será la responsable de revisar, modificar y votar el proyecto de Constitución bajo la cual se regirá el gobierno de la entidad 32 del país, a partir del año 2018.
El Instituto Nacional Electoral estima que el costo del proceso de elección de la asamblea será de 600 millones de pesos. Se instalarán alrededor de 12 mil casillas y se firmará un acuerdo con el Instituto Electoral del Distrito Federal, para que coadyuve con la organización de esta elección que asumirá en su totalidad el Instituto Nacional Electoral.
La cuestión es que los habitantes de la ciudad no elegirán, en su totalidad, a los miembros de la asamblea que estará compuesta de 100 diputados: 60 serán elegidos por medio de elección, mediante el principio de representación proporcional,14 serán serían designados por el Senado de la República, 14 más por la Cámara de Diputados, 6 por el Presidente de la República y los 6 restantes por el Jefe de Gobierno del Distrito Federal.
Las buenas noticias: Los diputados que integren la asamblea, no cobrarán.