Pide Dante Delgado se salvaguarde la seguridad de candidatos a alcaldes y diputados

Xalapa, Ver.- “El proceso electoral de Veracruz se vive en medio de la inseguridad”, opinó el líder moral del partido Movimiento Ciudadano, Dante Alfonso Delgado Ranauro que instó a las autoridades estatales ofrecer las garantías para que los candidatos a diputados y alcaldes, puedan participar en la contienda sin amenazas, secuestros y levantones. “Veracruz es un desastre y es visible, no se trata de lo que digan los políticos sino de lo que vive y piensa la sociedad”, dijo Delgado Ranauro en el marco de su visita a esta capital para participar en el inicio de campaña de Dulce María Dauzón. “No hay ningún pacto por México, el pacto de México lo hicieron tres partidos, pero un pacto para que funcione debe hacerse con la sociedad; en este país es más importante lo que se declara que lo se hace”. Y es que dijo, aunque Movimiento Ciudadano juegue limpio, otros hacen guerra sucia y eso no es válido, es lamentable y ruin. En ese sentido, Dante Delgado Rannauro  refirió que la guerra sucia hacia Dulce María Dauzón, la candidata a la alcaldía xalapeña, -a quien le mandaron a colocar propaganda para acusarla de actos proselitistas- ya se documentó. “Tenemos pruebas, y cuando resuelvan ese asunto vamos a creer en las autoridades, antes no, mientras no tomen cartas en el asunto, pero hay un antecedente negro en Veracruz. Por fortuna de las sociedades más informadas, con un nivel cultural alto, donde las redes sociales son importantes, pero no hay buen gobierno en Veracruz, eso salta a la vista”. En cuanto a los costos del proceso electoral, el también ex senador dijo que Veracruz tiene uno de los procesos más caros del país, y es que “Veracruz organiza dos procesos, y se da el lujo de aumentar el número de elecciones. Separó la elección de alcaldes de gobernador, piensan que de esa manera pueden hacer más fácil el fraude”. El ex mandatario de Veracruz lamentó la situación de crisis política y de inseguridad que vive el estado, a raíz de la llegada al poder de gente sin experiencia y con una excesiva ambición, que arroja resultados magros en la economía, el empleo, la reactivación de obra pública y el acelerado incremento de la pobreza.